Consideraciones para el uso de bandas de resistencia en el agua

Te estarás preguntando ¿Es posible usar estas ligas de resistencia en el agua? La respuesta es un gran “SI” solo debemos tomar algunas consideraciones en cuenta, es una herramienta genial para nadadores que desean mejorar su potencia, tiempos de relevo, fuerza muscular y resistencia dentro del agua, es importante salir de la rutina y agregarles giros diferentes a los entrenamientos para no aburrirnos y trabajar grupos musculares aislados.

¿Imaginas combinar entrenamiento en tierra y agua?

Realmente se puede sacar muchísimo provecho de la gravedad estando en la tierra usando sistemas de entrenamiento en suspensión, cuerdas para saltar, pesas y otros elementos, por otro lado, dentro del agua la flotabilidad otorga un plus especial para cada ejercicio ya que mientras la persona esté más sumergida en ella la fuerza muscular que debe aplicar es mayor, al igual que los movimientos coordinados y consciencia corporal.

Para evitar lesiones musculo-esqueléticas, inconvenientes y algunos accidentes dentro del agua por el uso de ligas de resistencia es importante que tomes en cuenta los siguientes aspectos:

• Elije el equipo adecuado: Este es el primer paso y no debemos saltarlo, la elección de las bandas es sumamente importante para determinar su función y duración, no todas las empresas ofrecen este producto a prueba de agua así que debes preguntar, leer todas las instrucciones y estar muy pendiente para saber que estas invirtiendo tú dinero en un producto de calidad.

A nivel mundial la mayoría de ligas de resistencia están elaboradas con látex y otras con aleaciones de diferentes materiales para hacerlas resistentes al agua, cloro y hasta la sal porque no es lo mismo el uso que la vayas a dar dentro de la piscina que en el mar donde existen mayor número de agentes corrosivos.

• Verifica resistencia, color y adaptaciones: Existen diferentes marcas a nivel mundial y cada una tiene conversiones especificas en cuanto a la relación del color de las bandas con su equivalente en resistencia, busca esta información antes de utilizarlas para saber cual se adapta mejor a ti y tus objetivos de entrenamiento.

• Inspecciona el equipo antes de usarlo: Es importante no saltarte este paso observando de cerca el producto en reposo y estirado para saber si tiene grietas, roturas, pliegues grumosos o algún daño, si este es el caso lo mejor es no usarlo porque puede romperse con mucha facilidad haciendo que no domines la banda y esta lastime tú piel o en el peor de los casos la mucosa del ojo.

• No confíes en terceros: No te fíes siempre de tú instructor ¿En qué sentido? Pensando que ya reviso el equipo y que todo está bien, no te tomara más de 5 minutos revisar las bandas antes de iniciar con el entrenamiento bien sea en tierra o agua.

• Compra bandas de resistencia con diferentes funciones: Si bien algunas personas desean ahorrar en la compra de equipos deportivos, la seguridad siempre debe ser lo primero.

Cuando adquieres diferentes tipos de bandas en cuanto a función y niveles de resistencia es mucho más seguro que tratar de acortar una banda para crear más resistencia, mientras intentas ahorrar un poco de dinero reutilizando algunos elementos podrías lesionarte o peor aun lastimar a otros sin darte cuenta.

• No las estires demasiado: Cada banda de resistencia tiene su límite, pero la mayoría de las marcas comerciales son capaces de estirar hasta 3 o 4 veces su longitud original, pero por seguridad siempre escucharás a los entrenadores decir que lo mejor es no exceder una banda más del doble de su longitud en reposo.

• Enjuaga las bandas después de salir del agua: Bien sea que estés en una piscina, lago o mar es importante enjuagar las ligas con agua limpia, dejar que sequen sin exposición directa del sol por mucho tiempo y después guardarlas en su empaque, evita dejarlas secar sin lavar porque el cloro o sal reduce su tiempo de vida, además al tirarlas dentro del bolso sin protección cualquier objeto filoso puede romperlas.

• No sueltes las bandas cuando están en tensión: Esto ni siquiera debe hacerse dentro del agua porque puedes lastimarte a ti o a otros en cuestión de segundos, lo mejor es enrollarlas una o dos veces en las manos o usar mangos para que no se escapen por accidente, además completar los rangos de resistencia estando consciente de las limitaciones de nuestro cuerpo.

• Lee las instrucciones del producto: Puede sonar muy obvio pero la realidad es que pocas personas se toman el tiempo de saber que están comprando y como pueden usarlo de forma segura, no te tomara más de 2 minutos y te sentirás mucho mejor sabiendo todos los detalles del equipo que estas utilizando.

• Evita exponerlas a temperaturas altas: Cuando las guardes escoge un lugar donde el sol no incida de forma directa ya que los rayos UV dañan el material reduciendo su tiempo de vida.

• Dile “NO” a los apoyos filosos: Existen miles de ejercicios que puedes llevar a cabo dentro del agua, algunos necesitan que apoyen un extremo de la banda para tirar del otro, en ese caso busca una base o apoyo seguro que no tenga bordes filosos que puedan romper las ligas de resistencia.

• ¿Cómo es su limpieza? Evita usar limpiadores químicos porque en la mayoría de los casos mezclados con el látex generan reacciones toxicas, además suelen degradar las ligas haciendo que pierdas tú dinero y tiempo, lo mejor es utilizar un paño húmedo solo con agua para retirar cualquier suciedad, restos de cloro y sal.

• ¡Activa tú creatividad!: Ahora que sabes todos los detalles en cuanto a seguridad solo queda crear nuevos ejercicios, planificar las rutinas y disfrutar de tus bandas de resistencia al máximo.

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